09 noviembre 2006

La lucha contra lo imposible


En el año 480 a. C., el emperador Jerjes I, al mando del ejército persa, que según las fuentes clásicas griegas contaba entre 250.000 y 1.000.00 de efectivos, seguía con su idea de conquistar Grecia y llegó al valle de las Termópilas, donde 300 hoplitas espartanos esperaban la embestida de su ejército. Jerjes pensó que los espartanos huirían al ver la magnitud de su ejército, pero esto no ocurrió y a los cuatro días envió un emisario a Leónidas, rey de Esparta, exigiendo que entregaran sus armas si no querían ser destruídos, a lo que Leónidas respondió:

Ven a buscarlas tú mismo


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"Leónidas en las Termópilas", cuadro de Jean-Louis David, Museo del Louvre


También se le advirtió que cuando los persas disparaban sus arcos "sus flechas cubrían el sol" y "volvían noche el día", a lo que Dienekes, soldado espartano, respondió:

Entonces pelearemos a la sombra

Al comenzar la batalla, los hombres de Leónidas resistían los ataques de los persas, y aunque las bajas que provocaban eran insignificantes en relación al número de efectivos, provocaban efectos devastadores en la moral de los soldados.Durante las noches, Leónidas solía decirles a sus hombres:

Jerjes tiene muchos hombres, pero ningún soldado.

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Entonces, Un griego llamado Efialtes (que significa "pesadilla") ofreció mostrarle a Jerjes un paso alternativo que rodeaba el sitio donde estaba Leónidas y acabar con su resistencia de una vez por todas. Sin dudarlo, Jerjes envió un importante número de sus fuerzas por el paso. Este paso se encontraba defendido por los focenses, pero siendo sorprendidos durante la noche por los persas, huyeron al primer contacto, sellando, de esta manera, la suerte de los defensores de las Termópilas.

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Al despuntar el alba del cuarto día Leónidas dijo a sus hombres:

tomad un buen desayuno puesto que hoy no habrá cena.

Fue tal el ímpetu con el que los espartanos lucharon que Jerjes decidió abatirlos de lejos con sus arqueros para no seguir perdiendo hombres. Leónidas fue alcanzado por una flecha y los últimos espartanos murieron intentando recuperar su cuerpo para que éste no cayera en manos enemigas.

La batalla duró cinco días y los persas consiguieron derrotar a los temidos espartanos, pero estos ya habían retrasado notablemente el avance persa, diezmado la moral de su ejército y matado a miles de soldados.

La hazaña fue recordada en una lápida conmemorativa escrita por el poeta Simónides que decía así:

Oh, extranjero, informa a Esparta que aquí yacemos
todavía obedientes a sus órdenes


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PD: El 9 de marzo de 2007 está previsto en cines de EEUU el estreno de "300", película basada en la novela gráfica de Frank Miller del mismo título.


300 de Frank Miller

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Se cuenta que Leónidas vestía, en el momento de su muerte, la equipación oficial del Alcoyano :P


Preciosa narración. Un abrazo.

Caronte dijo...

jajajaja, buen detalle, quizás algún día cuente también el origen de la frase "tener más moral que el alcoyano" ;) 1 abrazo

erizo dijo...

Yo no conocía esta historia (de todos es sabido mi penosa formación en la materia) hasta que la leí en el Museo Arqueológico de Atenas y me impresionó un montón, hasta tal punto que pensé ponerle ese nombre a mi futuro perro (aunque dependerá de las características del mismo, claro), de hecho, si los planes de ayer hubieran salido bien, el perrillo se hubiera llamado Leónidas (alias Leo).
No sé si alguna vez te lo había contado. De cualquier modo es curioso el vínculo, una vez más.
Besos a ambos.

Caronte dijo...

vaya, me alegro de lo del "vínculo" nuevamente, y me parece buen nombre para un perro, ya sabes que es símbolo de resistencia heroica. 1 abrazo

senses and nonsenses dijo...

caronte, soberbio post.
también a mí me has iluminado en una historia que no conocía.
me ha encantado leerte, como siempre.
un abrazo.

Caronte dijo...

Gracias, la Historia guarda hermosos momentos de los que aprender incluso en las batallas más sangrientas. Vuestras palabras me animan a seguir posteando. Abrazos

Gizmo dijo...

Buena reseña, me gusta. Termópilas siempre fue una inspiración, desde que mi vieja (señora madre) me contaba la historia antes de ir a dormir como mi abuelo se la contó a ella.

Quiero conseguir 300, pero está muy caro por estos lares. Te recomiendo, si es que se consigue por allá, Mort Cinder, genial comic de H. G. Oesterheld y Alberto Breccia, que en un capítulo trata específicamente sobre dicha batalla.

Caronte dijo...

he visto la ficha de la obra que me recomiendas en www.guiadelcomic.com y me gusta mucho la estética y la historia, lo pongo en la lista de pendientes. Gracias por la recomendación y la visita. 1 abrazo

Anónimo dijo...

Esta es una de la historia mas impactante de la antigua Grecia, el cual esta batalla inspiro y levanto en armas a todo un pueblo en contra el imperio persa y asi impedir su dominio en la region de Esparta, liderada por el Rey Leonidas unos de los heroes mas recordados en los ultimos tiempos.
Esta es una de mis historias favoritas en mi criterio personal y el propio ejemplo del heroismo en toda las historia, que nos hace falta en nuestra actualidad...